LLamar cuesta mucho dinero, así que decidimos mensajearnos durante el tiempo que me quede aquí.
+¡Tonto! Ya no quieres saber nada de mí... Ni te acordarás de que eramos los mejores amigos.
Sabía que al venirme al pueblo cada uno seguiría por su lado.
Ya sé que somos muy diferentes y que cada uno tiene sus amigos...
Pero dicen que lo diferente se atrae...
Tu eres mi norte, yo, soy tu sur... (L)

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